Desde pequeños nos enseñan amar, nos dicen que el amor es bueno, es lindo, mágico y lleno de colores. Dibujamos corazones, nos enamoramos de la idea del amor, porque el amor es bueno, o al menos es lo que afirman. Pero esto que siento... Esto no es bueno, no irradia colores ni buenas sensaciones; es perverso, oscuro e incorrecto. Recorre mi cuerpo, es veneno, llena mi sistema y cuanto más se adentra más cercana se hace mi condena. Yo soy su infierno y ella mi condena.All Rights Reserved