Louis Tomlinson es el cerebro más eficiente de todo el instituto Greenfields, destaca en todas y cada una de las asignaturas, especialmente en las ciencias, y toda su vida está fríamente calculada.
Es el amo y señor en las aulas, pero cuando el timbre suena y los estudiantes se dispersan por los pasillos, quienes reinan son Pink y su secuaz Daryl.
Pink Russell es el desmadre en persona, amante de las fiestas hasta el amanecer y fiel creyente del carpe diem. Hace lo que quiere, cuando quiere y como quiere pero existe un límite infranqueable en su vida: Acostarse con los niñatos de sus instituto o con cualquier persona relacionada al mismo.
No hay alumno en el Greenfields que desconozca su norma sagrada, pero esto no parece desilusionar a nadie, ya que existe una recompensa de cinco mil dólares para el primer estudiante que pase la noche con la chica más deseada.
Louis nunca ha estado interesado en ella, por el simple hecho de que no aparece en el reparto de su estimada vida detalladamente planificada, además de porque cree que Pink es tan solo una chica más del montón y que está sobrevalorada.
Él tan solo tiene ojos para la ya cercana convención de ciencia que se realizara en Nueva Orleans en pocos meses y por la cual lleva un año ahorrando.
Pero ¿Qué pasaría si de repente ese dinero que tanto esfuerzo le ha llevado conseguir desapareciera?