Lo que inicia con una fuerte desconfianza pronto se transformará en una atracción tan ardiente que amenza por consumirlos. Cada encuentro entre Julia Montoya y Richard Ríos es una batalla de voluntades; entre el deseo irrefutable y el juego. Julia sabe que Richard no es de su "gusto", pero cada mirada, cada roce la arrastra a una posición en la que nunca se había encontrado. Richard sabe que ella será su perdición y lucha para protegerla y mantenerla a su lado.