"Nerea, solo Nerea" eso decía ella cada que preguntaban por su nombre completo. Nerea siempre fue alguien cordial, amable, hasta cierto punto, con un corazón dulce como la miel. E incluso siendo así, siempre fue vista con malos ojos en la iglesia dónde vivía; más no prestaba atención puesto que ya tenía personas en las que confiar: Yui y Seiji Komori. Sin embargo, el rumbo de su vida cambia al ser mandada con su hermana del alma a una casa tan oscura y hostil como los que habitaban en ella. Oh, Sakamakis, si supieran que ella es una guerrera que jamás se doblega ante nadie. *Nota: OoC de algunos personajes por el bien de la trama*