Una vida sin colores, calidez o sensaciones, hasta que llega una persona incapaz de mantenerse quieta, que pinta y crea sus propios colores, buscando la emoción y aventura y de alguna manera te arrastra con él a un mundo donde sentir es lo único que puedes, amor, amistad, decepciones, un poco de consuelo y un dolor en el pecho.
Así se siente Kei desde que apareció Kageyama en su vida, con colores y dolores. Un mar de sentimientos en plena juventud, una historia que nunca puede tener final.
• Historia de mi autoría, no copias o adaptación.
• Los personajes no me pertenecen.
• Uso de letras de canciones en cada capítulo.
De todas las historias que pude publicar elegí la que apenas tiene 3 capítulos completos y una trama lenta e incompleta.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero