ㅤ ♡ ׂ 𝖽𐔎꯭𝗇𝗀 ! ׅ 🍃 ͡꒱ ࿙꛱࿚ׅ꛱֟࿙꛱࿚ׅ꛱֟࿙꛱࿚ 𖹭 ꛱࿙꛱࿚ׅ꛱֟࿙꛱࿚ׅ꛱֟࿙꛱࿚ ꆭ 🍃̼̼ᩙ ִ ֺ Sanemi, un joven de 18 años, tenía una rutina peculiar al salir de la preparatoria. Mientras la mayoría de sus compañeros se apresuraban a regresar a casa, él solía quedarse un rato más, cautivado por una escena que se repetía cada noche. Desde la calle, Sanemi podía ver a un hermoso joven en la azotea de un departamento cercano, mirando con una expresión serena hacia el cielo estrellado. La imagen del joven, con el rostro iluminado por la luz de las estrellas, era algo que lo fascinaba profundamente. Sanemi era un apasionado de la astronomía. Pasaba horas leyendo sobre constelaciones, planetas y los misterios del universo. Para él, no había nada más emocionante que contemplar el cielo nocturno y dejarse llevar por la inmensidad del cosmos. Sin embargo, en esos últimos meses, su interés había comenzado a centrarse más en el joven observador que en las estrellas mismas. Había algo en la combinación de su belleza y su aparente pasión por el universo que lo volvía loco. Cada noche, Sanemi se preguntaba quién era ese joven y qué pensamientos cruzaban su mente mientras contemplaba las estrellas. La idea de que alguien tan atractivo compartiera su fascinación por el cosmos lo intrigaba y emocionaba. Sin embargo, su curiosidad pronto se transformó en algo más profundo, una especie de admiración silenciosa que rayaba en la obsesión. Un día, impulsado por un deseo incontrolable de conocerlo, Sanemi decidió que era momento de acercarse. Subió las escaleras del edificio y llegó a la azotea, su corazón latiendo con fuerza. Al llegar, hubiera preferido nunca haber subido.