La vida de Mary siempre había sido tranquila y rutinaria: libros, música y soledad. Era la chica que todos veían en el rincón de la biblioteca, con los auriculares puestos y un libro en las manos. Pero la adolescencia es una época de cambios, y Mary estaba a punto de descubrirlo. Las decisiones que tomaría en el camino transformarían su vida de maneras inimaginables.
Cuando Mary decide asistir a su primera fiesta, un mundo nuevo se abre ante ella. Conocerá a personas que cambiarán la manera en la que ve la vida, también descubrirá la emoción de hacer nuevos amigos y la dolorosa realidad de perder algunos en el proceso. Las relaciones de Mary con los chicos serán un torbellino de emociones, con su personalidad difícil.