Las cosas no tendrían que haber salido así, se suponía que todo debía marchar a su favor. ¿En que momento las cosas cambiaron? ¿Por que la vida le estaba haciendo esto? ¿Por que le arrebata la realización de todos sus sueños? La desesperación lo invadió. Lo estaba perdiendo todo. Lo estaba perdiendo a él. Izuku Midoriya. La persona a la cual profesaba amor. Perderlo a él era inaceptable para Katsuki. El no poder cumplir con ese primordial sueño que venía arrastrando desde su niñez, era malditamente inaceptable. Todos sus sueños parecían ahora inalcanzables. Izuku parecía inalcanzable. La vida había sido injusta con él. Hasta que... -- Con eso podrías cambiar las cosas -- No debía dejarse tentar por ese individuo -- Claro, si eso es lo en verdad quieres -- No debía, pero estaba desesperado. Desesperado más que todo por perderlo a él, a Izuku -- Solamente te pido a cambio ese favor. No lo pensó mucho, aunque tuvo que haberlo hecho. -- Lo haré -- Fue su respuesta -- Pero... quiero eso también. -- Muchacho listo -- Le respondió esa persona -- Esta bien. La palabra "egoísta" por si sola sería poco para describir a Katsuki Bakugou en esos instantes, pero la frase "Maldito egoísta" hasta él debía admitir que le quedaba a la perfección. ^-^ Aclaraciones: Los personajes pertenecen al gran mangaka Horikoshi Kohei. Solo la historia pertenece a mi autoría.