Bokuto es un adulto joven de veinte años, desde sus quince años vive solo gracias a que sus padres murieron en un accidente automovilístico, no tenía más familiares cercanos, debía de sustentarse solo, claramente habían tratado de llevarlo a un orfanato pero el de cabellos bicolor escapó apenas tuvo la oportunidad, muy a su pesar tuvo que sacar todo el dinero que había en las cuentas de sus padres para poder usarlo en pagar las cosas como la luz, el agua, el internet y los datos de su celular.
Su vida fue todo menos fácil cuando sus padres murieron, por suerte seguía teniendo a su mejor amigo, su bro, Kuroo. Gracias a él seguía vivo, de no ser por él solo sería una cifra más del montón.
La depresión en la que había entrado era gigante, no había día donde no pensara en que fue culpa suya que sus padres hubieran tenido ese final, que fue culpa suya haberlos apurado por llegar a casa ya que estaba asustado. 𝗟𝗮 𝗰𝘂𝗹𝗽𝗮 𝗹𝗮 𝘁𝗲𝗻í𝗮 é𝗹.
No es hasta sus dieciocho que la idea de ir a la terraza de su escuela es muy tentadora, al hacerlo puede apreciar el atardecer con una pequeña sonrisa, no había muchas nubes, el viento era refrescante y la azotea tenía barandas no muy grandes, era como para que los alumnos pudieran reposar sus brazos con tranquilidad, era una fortuna.
Esta por hacerlo, pero es ahí cuando unas palabras lo detienen. ¿Quién mierda esta cantando en la azotea a las 5:46 de la tarde y por qué lo hace tan bien?
"𝘐 𝘸𝘪𝘴𝘩 𝘐 𝘸𝘢𝘴 𝘴𝘱𝘦𝘤𝘪𝘢𝘭.. 𝘠𝘰𝘶'𝘳𝘦 𝘴𝘰 𝘧𝘶𝘤𝘬𝘪𝘯' 𝘴𝘱𝘦𝘤𝘪𝘢𝘭."
El suave rasgueo de la guitarra era llamativo, tentador, lo invitaba a dejar todo lo que estaba haciendo para concentrarse en esa suave voz.
Nunca más volvió a escucharlo.
Ya estoy hasta la madre de escribir tantas historias sin terminar, pero aquí vamos de nuevo...
Donde un Draco Malfoy tiene autismo, fue abandonado por su madre y se hizo mejor amigo de Harry Potter antes que el trío de oro.
hay una serpiente blanca, un lobo negro y un diario.
Ah, y los fundadores lo ven como la cosa más linda del mundo.