Y Ghost odia lo mucho que König lo amaba. Era jodidamente obvio. Sus ojos verdes lo seguían a todas partes. Lo seguía como una sombra gigante y aterradora. König quería a Ghost. Estaba tratando de estar con Ghost. Pero ese era un pensamiento aterrador. No se sentía merecedor de König en absoluto. Ghost no se sentía merecedor de nadie. Ni de Johnny, ni de él. Escuchan que se abre la puerta. Soap sale tambaleándose, con las manos entrelazadas detrás de un chico joven y guapo que va en busca de una cita. Ghost tiene los ojos puestos en Soap. Siente como si le estuvieran apuñalando el estómago. Toda la tensión entre König y Ghost se evapora como si alguien hubiera vertido agua helada sobre sus extremidades. König también mira a Soap y apenas registra las palabras que salen de su boca. Debe ser el licor. "Yo... nunca seré él, ¿verdad? Solo soy un cuerpo útil para ti. Un sustituto. Fácilmente descartable si él aparece", pregunta König, con voz pesada. Ghost lo mira y casi siente pena. "Sí... Sí. Nunca serás él". O aparece König e invade cada parte de la vida de Ghost y le muestra todo lo que no sabía que se estaba perdiendo. Estúpido König. __________ derechos a su autor