Hace cientos de años, las primeras brujas los crearon para servir, les dieron como propósito cuidarlas y ayudar a los humanos. Pero a los humanos esto no les gustó, ¿cómo podían existir en la tierra criaturas más poderosas que ellos mismos?
Las cacerías por supuestos pactos demoníacos comenzaron y muy pocos de ellos sobrevivieron. Se adaptaron a vivir ocultos en las sombras, pasando desapercibidos y aprendieron el juego de los simples mortales. Aprendieron a tener poder sin usar sus generosas habilidades, aprendieron que el poder podía obtenerse de manera muy simple: El Dinero.
Aprendieron el juego de los humanos y lo jugaron mejor que ellos. Hoy dominan el mundo entero, hoy lo saben todo, hoy lo ven todo. Todo lo que ocurre es por orden de ellos, las personas más poderosas e influyentes del planeta les temen y siguen sus órdenes. Son un grupo, pero el descendiente del primero de ellos es el más especial. Él es el jefe, él es el rey, él es la última palabra, él es... mi padre.
Sobrevivió a la muerte pero el verdadero peligro acaba de comenzar.
Todos en el reino enemigo deseaban verla muerta, su desaparición significaba el fin de una era... o eso creían.
En lugar de morir, fue enviada al distrito de jinetes, un lugar donde el peligro acecha en cada rincón, y donde su verdadera identidad debe permanecer oculta a toda costa.
Pero no está sola.
Entre traiciones, criaturas indomables y un destino que se cierne sobre ella se encuentra Rigel Heisenbergs: el jinete más letal del distrito.
Su misión es protegerla, pero su mayor deseo es verla destruida.
Cada mirada entre ellos es una batalla silenciosa. y cada paso que da la acerca más a una guerra que podría consumirlo todo.
Un beso, una profecía y una traición que cambiará el curso de la historia.