-Escucha detalladamente
Su voz ronca estremeció mi cuerpo, pude sentir un escalofrío recorrer mi espalda, el corazón me comenzó a latir con fuerza y solo entonces pude percatarme de cuán grande era mi miedo hacia el.
-Tú estás casada con ese monstruo, serás una buena carnada
¿Carnada?, entonces ese era el motivo por el que me mantuviste con vida, todo este tiempo no fui más que parte de tu plan.
-Pronto vendrá a buscarte y cuando lo haga, estaremos esperándolo
Una risa burlona y carente de emoción fue mi respuesta, levanté la mirada por primera vez en mucho tiempo, fijando mis ojos en los suyos.
-¿¡Qué es tan gracioso!?, ¿Acaso ya enloqueciste? -Su mano sujetó con fuerza mi mentón, en respuesta escupi su rostro- ¿¡Quieres morir!?
Levantó su mano dispuesto a golpearme, pero uno de sus hombres abrió la puerta con rudeza, se sostenía el abdomen tratando de retener la sangre que brotaba de él. Abrió su boca intentando decir algo, pero ningún sonido salió de la misma.
-¿Ahora lo entiendes? -Finalmente hablé, aún manteniendo la mirada fija en sus ojos y una sonrisa de burla- Estás muerto, "Señor"