En la ciudad de jazz y misterio se sumerge,
Un locutor de voz encantadora, en sombras se esconde,
Alastor, su nombre en susurros emerge,
Con secretos oscuros que la lluvia responde.
En la radio su encanto, con arte despliega,
Historias y voces en cada transmisión,
Pero bajo la luz, su doble vida juega,
Con un corazón frío y una inquietante misión.
Entre el micrófono y el misterio avanza,
Entre la verdad y el juego, su danza se traza,
Con una sonrisa irónica y un paso elegante,
Alastor se mueve, en su juego desafiante.
El día se despide, la noche lo envuelve,
Con secretos y enigmas que en su mente se revelan,
En el corazón de Nueva Orleans, su nombre se disuelve,
Entre las sombras del micrófono, sus historias quedan.
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Hazbin Hotel Ellie
Hazbin Hotel Alastor
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.