En la vida, todos hemos experimentado algún amor prohibido, ese que, si se revela, puede traer consigo el juicio del mundo. Nunca pensé que sería mi caso, ya que estaba convencida de que jamás me enamoraría de alguien que no debía. Sin embargo, todo cambió cuando sentí las manos de los gemelos Jones recorriendo cada rincón de mi cuerpo, su toque delicado y sus miradas intensas llenas de deseo y amor. Fue entonces cuando comprendí que me había enamorado. Pero lo más complicado de esta historia es que no era amor por una sola persona, sino por dos.
Ahora, tras todo lo que hemos vivido, la pregunta que me atormenta es:
¿Cómo fue que me enamoré de los gemelos Jones?... mis hermanastros