Santiago ha vivido durante siglos como vampiro, adoptando el nombre de Saint; en la actualidad desdeña la moralidad de la humanidad, extraña la elegancia de antaño. Vive su existencia aburrida hasta que un aroma más dulce de lo usual llama su atención y lo guía hasta Dragón.
Pero Evan, nombre real de Dragón, representa todo aquello que no le gusta de la humanidad actual: con su rebeldía y desenfreno, a pesar de esto último Saint no puede ignorar el olor tan dulce de su sangre.
La noche es de Santiago, quién anhela la sangre de Dragón.
El día es de Evan, quién quiere escapar de Saint.
"Se les llama seres feéricos, son seres humanos que han desarrollado características especiales para atraer a los de nuestra especie. Su sangre y su olor son extremadamente dulces, como ya habrán notado, además de que su sangre es más beneficiosa para nosotros, de igual manera su longevidad y resistencia se extiende bastante cuando encuentran a una criatura como pareja."
[COMPLETADA] Ella es un vampiro convertido. Él es un vampiro purasangre. Ella aún se aferra a su humanidad, él es un asesino frío. Sus mundos son completamente diferentes, son enemigos naturales. ¿Qué pasará cuando sus caminos se crucen? ¿Y si para ella, él es la clave para descubrir la verdad?
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