- entonces te irás?- pregunto con corazón tratando de fingir que no le dolía. - si, solo te hago daño, quedándome aquí...- respondió aquella persona que aceleraba al pobre e iluso corazón, para hacer que se detuviera y al despertar, latiera más rápido que nunca por la desesperación de perder a esa persona. - está bien... lo entiendo. te deseo suerte- sonrió aquel corazón mientras se desquebraja, sintiendo la agonía que lo envuelve. - responderas mis mensajes verdad?- pregunto aquel, intentando ignorar como el corazón se derrumba mientras se tambalea aguantandose las lágrimas. - Lo intentaré...- y así, el corazón, se marchó, sin decir mas, sintiendo el peso del, "hubiera", del "Tal vez", del "quizás", del... "Podría haber hecho más". Y al pasar la puerta de su hogar, pudo sentirse a si mismo... colapsar.