Lune Stafford, una chica que no se comprende a sí misma pero que los demás la describen como dulce, amable e introvertida. Su vida de relativa tranquilidad llegó a su fin cuando se enteró de que tendría que mudarse. Este cambio inesperado la descolocó por completo, haciéndola preguntarse si se trataba de una especie de karma que la obligaba a enfrentar su pasado.
Ahora, Lune se enfrenta al desafío de empezar de nuevo, o al menos intentarlo, porque justo cuando parece que podría dejar atrás su antigua vida, personas inesperadas reaparecen. Ella se engaña a sí misma diciendo que todo está bien, pero en realidad, su vida se convierte en una tormenta cuando su pasado colisiona con su presente.
Lo que Lune creía haber superado regresa para derrumbarla. La pregunta es: ¿podrá esta vez enfrentarlo y superarlo, o se rendirá como un soldado que nunca llegó a luchar en la batalla?
Sin embargo, los problemas de Lune no terminan ahí. En su camino, se ve envuelta en un misterio que debe resolver antes de que el tiempo, y las respuestas, se le acaben. ¿El problema? Es que las respuestas están ocultas en aquellas personas de las que intentó olvidarse y superar en el pasado.
«Tal vez pienses que mi historia es algo ordinaria y fácil de olvidar, pero, cuanto más lo pienso, creo que es de esas historias que preferirías no releer nunca más en tu vida».
Liam era el chico popular con fama de malote que desde lejos parece no tener sentimientos, Natalie una chica de libros que va de aquí para allá con una sonrisa siempre pero cuando tiene que ser dura, lo es.
Natalie era todo lo contrario que Liam quería en una chica, pero ella ahora es la única que logra ver algo en el que los demás no pueden, pero hay algo que ella aún no sabe. La falta de comunicación y el no sabes expresar los sentimientos fue lo que les faltó a ellos.
Eran la persona adecuada y por no saber expresar lo que sienten, nunca lo supieron.