HONEY, HONEY | L.S

La ciudad parpadeaba con luces fluorescentes, y el reloj en la pared marcaba las horas sin piedad mientras el escritorio de Louis estaba inundado de informes y papeles, su rostro mostrando el agotamiento de días de trabajo interminables. Harry le observaba con preocupación desde el umbral, incapaz de esconder su frustración. Era la enésima vez que llegaba tarde a casa, y esta vez, había cruzado un límite que no podía ignorar.

La tensión en la habitación era palpable. Ese maldito proyecto que había consumido la vida de Louis durante meses, dejando a su familia en un segundo plano sin siquiera ser consciente. Y Harry sentía que su relación se estaba desmoronando.

El viaje a Grecia para celebrar su aniversario se avecinaba, pero la distancia emocional entre ambos parecía insuperable. Mientras el tiempo avanzaba inexorablemente hacia la tierra donde se habían conocido, la pregunta flotaba en el aire:

¿Podrían encontrar la forma de resolver sus diferencias en el lugar que había sido el primer testigo de su amor, o sería el punto de quiebre que separaría sus caminos para siempre?

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