Dos almas, que al sanar se reencuentran.

Un amor por diez años. Un lazo espiritual, una conexión de vidas pasadas.
- Debo irme - susurró él con lágrimas en los ojos.
- Por favor, no te vayas ... - le dijo ella entre lágrimas.
- Lo siento, debo encontrarme conmigo mismo y no quiero seguir haciéndonos mal - la abrazo fuertemente y acaricio su rostro.

Rosario y Pablo, habían construido un mundo juntos y se estaba desmoronando a sus pies, aunque aún nadie sabía que, este cambio sería lo que los llevaría a reunirse otra vez.

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Hola, me parece presentarles una novela que estoy escribiendo con todo mi corazón, me reservo cualquier parecido a la realidad con mi vida, solo diré. Siempre hay un poco de verdad en lo que escribimos.