El campamento Three Rivers te invita a relajarte, explorar y tal vez incluso enamorarte... Yoko Apasra ha superado por completo a su ex. Claro, su primera relación con una chica podría haber terminado en una ruptura catastrófica de la que la gente todavía susurra, pero ya ha terminado con eso. Los cuatro años transcurridos desde entonces la han hecho más fuerte. Más inteligente. Cuatro años la han convertido en el tipo de mujer que no cree en deseos a las estrellas ni en segundas oportunidades milagrosas. Como aspirante a científica ambiental, Yoko deposita su fe en datos fríos y concretos, y los datos dicen que no hay forma de que algo bueno pueda surgir de meterse con una chica que ya le rompió el corazón. Faye Peraya sigue completamente enamorada de Yoko Apasra. Cuando una serie de desastres la llevan a vivir en el sofá de su prima y de regreso a la pequeña ciudad isleña que nunca pensó que volvería a ver, Faye se ve obligada a enfrentar la verdad: dejar atrás a Yoko fue el mayor error de su vida y daría cada estrella del cielo por tener otra oportunidad. Mientras la vida apretada en una pequeña ciudad hace que sea imposible ignorar la forma en que las dos mujeres todavía brillan como un incendio forestal, Yoko se da cuenta de que las razones de Faye para irse podrían no haber sido tan sencillas y que el futuro que ha planeado para sí misma mientras tanto podría no encajar tan bien como pensaba. Los datos sugieren que solo les espera otro desamor, pero cada teoría tiene la más mínima posibilidad de resultar errónea, especialmente cuando su última oportunidad de encontrar el amor podría depender de que finalmente las cosas salgan bien.