La engreída utopía en la mente de aquellos sin alma, cuyas pesadillas han trastornado la concepción del temor, le hace parecer un lugar seguro, pero no lo es en realidad; Krenzville nunca lo ha sido desde que hay gente sobre sus tierras. Para Rose Rashfordson no es un secreto, ni para los otros: lo saben. Un insignificante pueblo entre los bosques demanda su herencia basada en el origen del misterio. Aun desde antes de 1927, la consciencia colectiva del caos silencioso e irremediable hace desvanecer la tranquilidad de todos, aunque las desapariciones no cobrarán mayor significado mientras se mantengan en casa durante el tiempo que dura la noche. El bosque es peligroso y alberga la voz de un fantasma del pasado, de modo que la vida de los cuatro está en riesgo. Pero el valioso lazo que les une a Robert Reznordton les hará enfrentar, no sin ayuda, el horror de la muerte y los ojos de un demonio milenario, un enemigo aliado a la traición.