7 parts Ongoing Porque, en ocasiones, el dulce y el picante son la mejor combinación.
Marta de la Reina se ha acostumbrado a mantener una existencia apagada dentro de esa jaula de oro en la que su familia la colocó el día en que nació. Siempre ha disfrutado dando golpes a los barrotes dorados, doblándolos a su antojo, pero sin llegar a romperlos nunca.
Lo que jamás se hubiese esperado es que el golpe de gracia, el que lo cambiaría todo, vendría de la mano de unos bollos suizos, unos ojos de color imposible y una sonrisa capaz de derretir la más fría de las corazas.
Y es que, a veces, el dulce amarga y el picante reconstruye nuestro mundo desde cero.