Odio las historias de amores incompletos...pero aquí están.

Todos tenemos un amor incompleto, uno que, por alguna razón, no llegó a serlo.

Todos tuvimos a la persona correcta en el momento incorrecto.

Todos vivimos amores fugaces, amores jóvenes.

Amores sin destino y otros, sin sentido.

Odio que exista belleza incompleta o tal vez, en ello radica, en que terminaron a tiempo o ni eso tuvieron.

En algún lado habría de meterlas. Decidí hacerlo, aquí.

Esto va, para todos los amores que la vida nos prestó desde que eran niñerías, pero ya no lo eran más.