En una mansión escondida en lo profundo del bosque, existe un lugar que promete paz para aquellas que han perdido toda esperanza: El Jardín de las Alas Rotas. Aquí, un hombre que se hace llamar el Cuidador selecciona con precisión a jóvenes mujeres que han sufrido tanto que parecen estar más cerca de la muerte que de la vida. Algunas tienen enfermedades mentales, otras lidian con sufrimientos crónicos, pero todas comparten un común denominador: están rotas.
El Cuidador las rescata, ofreciéndoles un refugio del dolor y de un mundo que ya no las quiere. Dentro de sus muros, las mantiene a salvo, o al menos eso es lo que les hace creer. Pero el jardín no es lo que parece. Bajo la superficie de su belleza se esconde un lugar en donde la mente se retuerce y el control es la mayor forma de manipulación. Cada chica es como una mariposa con las alas rotas, incapaz de volar, pero mantenida en cautiverio, creyendo que están mejor así.
A medida que Isabela, la más reciente "rescatada", comienza a descubrir las sombras detrás del Jardín, se enfrenta a una verdad aterradora: todo es un juego psicológico, donde la realidad y la ficción se entrelazan hasta hacerla dudar de su propia cordura. ¿Es el Cuidador su salvador o su captor? ¿Realmente están seguras, o el verdadero enemigo es su mente?
En el Jardín de las Alas Rotas, luchar puede no ser la respuesta. A veces, escapar de la jaula no significa encontrar libertad, y las alas que no vuelan quizá no deban intentarlo nunca más.
Y mientras las dudas se multiplican, las palabras del Cuidador se clavan en sus corazones como un veneno:
"A veces, lo más doloroso no es perder la libertad, sino descubrir que nunca la tuviste."