Dios, es que no puedo evitarlo, no puedo evitar mirarlo, no tengo miedo de mirarlo directamente hacia sus hermosos ojos, esos ojos que pueden hacerme desmayar, esa sonrisa que puede hacerme babear. Lo conocí en una situación nada sorprendente, todavía no hay confianza, pero esos ojos, esa sonrisa, esa piel, ese pelo, no me importa si es más bajo que yo, si no nos conocemos mucho. Yo a este man lo quiero.All Rights Reserved