Bajo la luz de la luna llena, ella salía a cazar, sin consumir su medicación. Así ha sido toda su vida, desde los seis años, perdía el control y lo tomaba una identidad mucho más cruel, más poderoso y sanguinaria, y al día siguiente no se acordaba que había ocurrido. Beverly Hills estaba al tope de maltratos, asesinatos y/o abusos, de todo ocasionado por una misma persona.