Tras haber perdido a sus padres a causa de un accidente, Kim TaeHyung acababa de asumir la presidencia de su empresa y ahora debe hacerse cargo de los negocios familiares y de su pequeña hermanita. A estos cambios se le sumó un chico de grandes ojos negros que lloraba frente a su edificio en una tarde lluviosa. -Oye, ¿estás triste? ¿Por qué estás llorando? -Deberías ir a casa, pequeña, te enfermaras con la lluvia. -Perdona la indiscreción de Yumi, ya nos vamos.All Rights Reserved