El reino de Clyendor se encuentra al filo de derrumbarse. Silvanox, un ser oculto y cruel, ha surgido de las sombras para desatar el desorden, asesinando tanto a nobles como a campesinos, sin dejar huella. Ninguna persona puede frenar a este monstruo, cuyo poder aumenta con cada muerte. Sin embargo, las leyendas relatan a un hombre que, hace décadas, consiguió lo inimaginable: vencer a uno de estos horrores imperceptibles. Ese individuo es Thorn, el Vidente de las Sombras, que actualmente reside retirado como un modesto agricultor, alejado de la gloria y las sombrías memorias de su pasado.
Desesperado, Lignarion Drenhyr, el séptimo hijo del gran señor es asignado a rastrear a Thorn, con la esperanza de que el mítico guerrero decida luchar contra Silvanox de nuevo. Sin embargo, Thorn no es el héroe que las baladas puedan recordar: está fracturado, agobiado por el tiempo y las heridas, y comprende que enfrentarse de nuevo al Silvanox sería como marchar hacia la muerte.
Reconocer esta misión no es simplemente un gesto de coraje, sino un veredicto de muerte. No obstante, si Thorn no se levanta otra vez, Clyendor se derrumbará. Ahora, tiene que determinar si está dispuesto a entregar todo, incluso su vida, por una causa que no puede vencerse.
El futuro del mundo está en manos de un hombre herido, un héroe sin intención de sacrificar su vida.
En su vida anterior, Tang Shi fue carne de cañón. Por ser un idiota, incluso rechazó una cita a ciegas que le había organizado su padre, pero finalmente murió en manos de su amante y su medio hermano mayor.
Antes de morir, su hermano mayor le dijo que el que siempre iba en su contra, se burlaba de él y lo usaba como cebo era el que realmente lo amaba, también esa cita a ciegas que su padre había organizado para él: Yan Xu.
¿Te sientes arrepentido?
¿Qué habría pasado si no hubiera tomado ese tipo de decisión desde el principio?
_____
(Todos los derechos a su respectivo autor)