Satoru Suzuki vivió en el año 2138, su vida entera estaba alrededor de su videojuego favorito llamado Yggdrasil, murió trágicamente mientras esperaba a qué el hermoso mundo qué había creado con sus amigos cerrará definitivamente sus servidores. Su muerte fue solo una más, de las tantas qué habían en su mundo destruido por los errores de la humanidad, aunque a diferencia de tantos otros, él fue bendecido con una segunda oportunidad. Reencarno en un mundo donde algunas personas nacían con el poder de controlar los elementos de la naturaleza, tierra, fuego, agua y aire. En este nuevo mundo, tendrá qué elegir su destino, haciendo uso de las habilidades únicas qué llegaron con él. No soy dueño de Overlord ni de Avatar: La leyenda de Aang, todos sus derechos a sus respectivos creadores Kugane Maruyama, Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko.