- Tengo una sensación de anhelo, es nostálgica, un poco esperanzadora, este lugar, los paisajes - hice una pausa, mirando con asombro toda la naturaleza del lugar. 𝘗𝘦𝘳𝘰 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘦𝘭𝘭𝘢... A mi mente vino la hermosa joven de cabello castaño, vestido blanco y hermosa sonrisa gomosa, que nos recibió en la estación. - Puede ser un simple déjà vu T/N - respondió mi amiga pelinegra, relajándose en su asiento, mientras tomaba un sorbo de su copa de vino. - No lo creo, esto no es una casualidad, ni una coincidencia, hay algo más, puedo sentirlo en mi corazón... [𝑵𝒐 𝒔𝒆 𝒑𝒆𝒓𝒎𝒊𝒕𝒆𝒏 𝒂𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒏𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂 𝒔𝒊𝒏 𝒆𝒍 𝒄𝒐𝒏𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒆𝒔𝒄𝒓𝒊𝒕𝒐𝒓𝒂]