Nicki era la protagonista de nadie, una melodía silenciosa en un mundo bullicioso. Dulce y empática, su introversión se ocultaba tras una extrovertida fachada que solo se rompía ante aquellos que realmente captaban su atención. La música y el arte eran sus lenguajes, y se enamoraba con facilidad de las miradas cálidas como el café azucarado. Una soñadora empedernida, devoradora de libros que combinaba su pasión por un buen Coelho con partidas nocturnas de videojuegos y su estatus, moldeado por su entorno, se convertía en una estrategia para navegar por la vida. Nemo, confundido por el brillo de Nicki, creyó que finalmente había encontrado a su «alguien especial». En la confusión de dos almas rotas, pero hermosas en su imperfección, ambos se prometieron amarse hasta que el cliché los separe. ----------------------- Primer borrador. ⏳