Destinados.

Nadie podía ponerme de mal humor más rápido que Daryl Dixon.

El cazador parecía tener intenciones de provocarme cada vez que estábamos cerca y no de manera romántica, podría jurar que disfrutaba discutiendo conmigo.

Lo detesto, lo detesto desde lo más profundo de mí corazón, involucrarme con él fue de los peores errores de toda mí vida.

<<Sigue diciéndolo hasta que lo creas>> Mí estúpida conciencia se burlaba de mí, cada vez que tenía un gesto amable o hacía algo para ayudar al grupo mí corazón se aceleraba y por ese mismo motivo debía mantener la distancia.

Nada bueno saldría de involucrar mis sentimientos con alguien que parecía no tenerlos. ¿cierto?