⌗ᥬ🤍 ⸻ Desde lejos, la observaba, y cada vez que lo hacía, sentía que mi corazón latía a mil por hora. Sara, con su sonrisa brillante que iluminaba la sala, era la razón detrás de mi descontrolada adrenalina. Su cabello castaño, largo y suave, caía delicadamente sobre sus hombros, enmarcando un rostro lleno de dulzura e inocencia. Era todo lo opuesto a mí.All Rights Reserved