Los desafíos que una cultivadora tuvo que superar en su trayectoria vital fueron innumerables. No debe faltarle talento, técnicas de cultivo, píldoras medicinales y armas mágicas. De lo contrario, su cultivo progresaría demasiado lentamente. Tampoco debe tener demasiadas emociones, debilidades, bondad y codicia. Si tuviera demasiadas, pronto le diría hola a la muerte. Además, no podía ser ni demasiado bonita ni demasiado fea, y, aunque no podía ser tonta, tampoco podía ser demasiado inteligente. Como cultivadora, Mo Tiange naturalmente tuvo que enfrentar esos desafíos. Sin embargo, haber quedado huérfana desde una edad temprana había fortalecido su tenacidad y resiliencia. Ni tener lo que se consideraban raíces espirituales inútiles ni recursos limitados pudieron disuadir su espíritu. Mantenerse lo más discreta posible pero nunca dejar pasar una oportunidad era su vida diaria. Sigue a Mo Tiange mientras se embarca en un viaje para sobrevivir y lograr la inmortalidad en el duro y despiadado mundo de la cultivación... Titulo Alternativo: Lady Cultivator