"-No importa si no puedo jugar, el volleyball siempre será parte de mi..."
Desde muy pequeña he practicado este deporte, es mi vida, mi madre solía decirme que nunca me había visto tan dedicada a algo, pero esto de verdad me apasionaba, me gustaba, tanta era mi destreza que logré ser capitana del equipo femenino de la secundaria en la que estaba, la cual casualmente era la misma que la tuya, al acabar la secundaria sabía que quería seguir estando en las canchas, y lo logré, también fui capitana del equipo femenino de la preparatoria Karasuno durante dos de mis tres años, sin embargo... todo se fue a la borda...
Freen era una omega bastante rara para la personas aquellas decían que era un poco más alta para ser una omega otros que podría dar miedo si te miraba y algunas personas solo quedaban enamorada de verla aunque para Freen todo era normal pues siempre era amable y nunca se enojaba atenta con sus seres queridos era la chica perfecta como sus padres solían decir.
Becky una pequeña omega tan hermosa como la primera nevada era una chica responsable y cuidadosa con todo lo que hacía vive esperando a que aquella omega aparezca una vez más a su vida pues recuerda que alguien la salvó cuando era pequeña más no recuerda su rostro así que vive con la ilusión de que algún día aparecerá.
Pero ¿Qué pasaría si la persona que espera aparece en último año de universidad? ¿La reconocerá?