Los humanos tenemos la capacidad de hablar, pero ¿de qué sirve si es tan difícil pedir ayuda?
Elaila Smith, una chica que siempre trata de ver lo positivo en la vida, se encuentra cruzando su último año de preparatoria, diversión, felicidad y escritura, esas eran sus únicas preocupaciones y atracciones, o eso era hasta que lo conoció.
Keinner, el nuevo estudiante, se vuelve su compañero de mesa, y a pesar de esa máscara de seriedad, prepotencia y molestia, Elaila no puede evitar sentirse atraída hacia él, porque ella, muy en el fondo, sabe que son parecidos.