Cada 23 de diciembre

Peyton y Jacson se conocieron cuando solo eran unos niños en vísperas de Navidad, ella siendo una niña alegre a pesar de las penumbras de no tener un hogar y él siendo un niño rico que fue obligado a asistir como voluntario en un albergue como castigo. Ese mismo día se prometieron encontrar cada 23 de diciembre en el mismo lugar, generando sus propias tradiciones de Navidad, hasta que él un 23 de diciembre nunca llego.

Ese día se despidió a través de una carta donde rompía el corazón de la pequeña niña que se había ilusionado. Nunca sería amigo de una niña sin hogar, que solo había sido un caso de caridad que ya no estaba dispuesto a ayudar.

Los años pasaron y cada uno hizo su camino en el mundo: ella estudiando y trabajando para salir adelante, cerrando su corazón porque no iba a permitir que nadie la volviera a lastimar, y él siendo uno de los jugadores de la NBA más reconocidos del momento. Pero sus caminos se volvieron a entrecruzar un 23 de diciembre donde menos se lo imaginaron, pero ya no estaban en el mismo lugar, no cumplían sus tradiciones y mucho menos eran las mismas personas.

Libro lleno de emociones, romance de Navidad, diferencia social...