La mano del mexa se acerca a él. Se pasea delicadamente por su nuca. Las puntas de sus dedos rozando con cuidado el cabello corto. Se pierde un momento en la sensación, pero una respiración suave contra los labios le hace realizar algo. Están cara a cara. Para que algo así fuese posible, Checo debía estar apoyándose en puntas... O es que él se había encorbado... La celebración privada en honor al piloto número 11 tras el GP de México se pone... Interesante