Addison Halsted Upton, sí, seguro que os podéis hacer una idea de quiénes son sus padres. Es la única hija de los agentes secretos Kevin y Dalia Halsted. Después de todo lo ocurrido, fundaron su propia agencia secreta en Sidney, Australia, para así, criar sin problemas ni peligros a sus hermosos cuatro niños. Addison es la mediana de ellos, y la única mujer por ende. Su mayor sueño, es poder estudiar en la universidad de Michigan. Claro que, le costará irse de allí ya que ella, ama su hogar. Pero eso no le impedirá viajar a otro continente para lograr su objetivo.
Por otra parte, en los pasillos de dicha universidad de Michigan, rondan de allá para acá los famosos integrantes del equipo de fútbol americano, en especial 8 de ellos. Las mujeres babean por ellos y los hombres los miran con admiración y otros, con odio por ser mejores que ellos. El equipo de fútbol siempre está unido, tanto fuera como dentro del campo. Y la diversión y la rebeldía recorre por sus venas.
Cuando Addison ingresa a la universidad, se ve envuelta en tremendo lío que no se esperaba como bienvenida a su primer año: el secretario del director cometió un error de novato, creyendo así, que Addison, era un hombre, y por ende, mandándole directamente a vivir en Kings Delta, la fraternidad donde viven los 8 chicos más sexys de la uni. Addison, después de haber intentado arreglar todo este embrollo, se da cuenta que no le queda más opción que aguantarse y vivir entre 8 hombres.
Juntos, comenzarán una gran aventura peligrosa, sin que se den cuenta de ello, que los llevarán a descubrir el secreto de Addison, y un pequeño viaje en equipo a la ciudad natal de esta, para encontrar así, respuestas. En toda esta estancia, Addison se da cuenta que no es tan malo vivir con hombres, y, puede, que el amor, esté resurgiendo de sus cenizas entre dos personitas, creando así: un perfecto error.
(No es necesario leer el primer libro para leer este, pero es recomendable par
Ulises Webster debía haber muerto esa noche. En cambio, ese accidente automovilístico sí que le había dejado heridas, y no sólo físicas.
Su vida anteriormente estaba llena de fiestas, arrogancia, hipocresía, vida social, sin embargo, todo había llegado a su fin. Ulises aún tenía la oportunidad de despertar, aunque siempre anhelaba que la muerte le llegará, después de todo, estaba solo.
Muchas preguntas lo dejaban con insomnio en las frías noches, pero principalmente una.
¿Quién querría estar con una persona ciega?