Danza de la luna y el sol: cruzamiento de destinos

Un demonio más, era un demonio que daría todo por salvar a sus compañeros, aunque, esos cazadores eran muy amables con él, y él sentía que debía protegerlos, aún si sus compañeros morían, aún si su amo se enojaba con él y empezaba a repudiarlo, él, en su instinto, sabía que ellos necesitaban su ayuda, y, afortunadamente, al mismo tiempo, su amo le encomendó una misión, fingir ser su aliado, esa iba a ser su excusa, solo debía informar lo que sucedia.

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Ellos se conocieron en una situación difícil, su padre estaba enfermo, sus hermanos eran vulnerables frente a los enfermos.
En un momento, todos estaban a punto de morir, con su padre enfermo y su madre lastimada, no sobrevivirían a ese loco. Pero, él llegó y los salvó.

Mató al maldito enfermo y verificó uno por uno a los niños, sintiendo una emoción conocida al verlos, un instinto que lo obligaba a protegerlos. Su madre y su padre le agradecieron, era un espadachín algo extraño, pero gracias a él y su ayuda, ahora tenían algo de dinero extra para emergencias, su padre parecía más saludable con la medicina, aparentemente muy cara, que él les brindó, y ahora tenían mantas más cálidas, pudiendo soportar el invierno de una mejor manera.

Eso hizo que al verlo, incluso cuando con sus propios ojos, como devoraba una persona, él lo defendió con todo, no estaba dispuesto a dejar que lo mataran, ese hombre que devoró, él asesinó a personas inocentes por placer, su salvador y de su familia no era malo, solo lo hacía para sobrevivir, los otros no sabían cómo lo hacía Nezuko, era incluso doloroso, pero él lo había protegido, entonces era hora de devolver el favor.