Lugar Seguro | Omegaverse

A veces el aire de todo a su alrededor desaparecía y sentía que empezaba a ahogarse, como si estuvieran prohibiéndole respirar. Aquella sofocante sensación sólo desaparecía si ayudaba a los demás, si sólo escuchaba el gracias de los agradecimientos.

Todo aquel pesar que un día no estaba, volvía al día siguiente. Sin descanso, sin dejarla en ningún momento en paz.

Así era el día a día de Dania e incluso fue así cuando su camino se cruzó con él, esperando un ansiado gracias que la hiciera volver a respirar.