Los días en la academia se volvieron más pesados a medida que se acercaban los exámenes, y aunque las materias de laboratorio eran las favoritas de la mayoría, había otras clases que causaban más dificultades. Lloyd Garmadon, conocido por su dedicación en la teoría y la práctica en la tarea de quimica , siempre había tenido una ligera ventaja en las materias de laboratorio. En cambio, Kai Smith se enfocaba más en los deportes, los reflejos y en todo lo que pudiera explotarse. Así, cuando la profesora de química anunció un proyecto final en parejas, Kai y Lloyd fueron asignados juntos.
-Espero que seas bueno en química, Kai -le dijo Lion con una sonrisa nerviosa, mirando a su compañero de equipo y amigo de toda la vida.
-¿Química? No te preocupes, Lloyd, ¿qué tan difícil puede ser mezclar unas cuantas cosas y hacer un par de explosiones? -Kai soltó una carcajada, pero Lloyd solo pudo responder con una mueca, registrando cuántos "accidentes" había tenido su amigo en laboratorios anteriores.
Ambos sabían que las cosas no iban a ser tan sencillas, pero el proyecto era una oportunidad para que Kai entendiera el verdadero significado de la química y para que Lloyd aprendiera a confiar en su compañero... en todos los sentidos.
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero