-¿Renunciarías a todo por estar con alguien como yo? ¿Aun si esto no funciona? -"Ni las distancias más grandes podrán separarnos, ni el pesar más intenso podrá hacerme odiarte- sus ojos se cristalizan levemente y continuo- y la mentira más vil jamás provocara mi desprecio, y aunque olvide hasta mi propio nombre nunca podré olvidar tu existencia porque mi corazón te pertenece y con ello mi vida entera" Una lagrima rueda por su mejilla al momento en el que abre sus ojos, en ellos denota miedo, miedo al no saber si está haciendo lo correcto, miedo de salir lastima y miedo a enamorarse. Con mi pulgar izquierdo limpio aquella gota acariciando sus facciones lo cual aviva una sonrisa en su rostro e igual en el mío. -Si eso responde tu pregunta entonces sí, renunciaría hasta a mi alma con tal de intentarlo contigo- hablo sinceramente- ¿y tú? -Ya lo estoy haciendo. Otros segundo más de silencio transcurren en donde solo nos dedicamos a observarnos mutuamente para luego atrapar nuestros labios en un apasionado beso, un beso de verdad el cual se siente de maravilla, ese beso que provoca que todo a tu alrededor se detenga. Una vez que el aliento nos falta nos separamos recargando nuestras frentes. -Sabes, no sé el motivo por el cual siento que no conocemos desde hace tiempo- suspiro- como si te hubiera visto antes. -Tal vez fuimos amantes en otra vida que buscan pertenecerse de nuevo en esta- se encoje de hombros separándonos unos escasos centímetros- o simplemente me has visto en tu sueños. -Si -colocó un mechón de cabello detrás de su oreja- tal vez te he visto en mis sueños. *Recomendación de la autora: NO SE ENCARIÑEN CON LOS PERSONAJES.All Rights Reserved