Noches de plenilunio

El nacimiento en una cuna de oro es el anhelo más elevado para aquellos que han sido constreñidos por las limitaciones de su casta. Aurelio, miembro de una estirpe de omegas puros, había crecido en un entorno donde los Alfas y Betas superaban en número, mientras que los omegas eran apreciados únicamente por su belleza y capacidad reproductiva.

Sin embargo, Aurelio repudiaba su papel en esta sociedad, y en cambio, exhibía una personalidad indomable y orgullosa, más propia de un Alfa. Pero el destino es caprichoso, y Aurelio pronto descubrirá que la llegada de un nuevo sirviente Alfa a su clan será el catalizador que transformará su percepción del mundo y lo obligará a cuestionar todo lo que creía saber sobre sí mismo y su lugar en la sociedad.