Todo es perfecto para el amor. Sin embargo, el terror acecha a Caroline, que como capricho a insistido en acompañar a su hermano desde Londres hasta El Cairo. Ahora por ese capricho es prisionera de un desconocido. Raptada y llevada al galope sobre su veloz caballo hasta un campamento bien escondido, Caroline se ha jurado a si misma que jamás será su esclava. Pero muy pronto entenderá que el se ha convertido en su dueño