Hasta encontrarnos en Marte

El paso de una historia de amor es complicado para cualquiera, duele pensar que no seremos capaces de olvidar a aquella persona que le entregamos todo, pero duele aún más cuando te aferras a no querer superar, a volver a intentar algo que por mi propia culpa ya murió.
La luna, el sol o las estrellas desvanecen, se tiñe de negro mi existir y creo que nunca volveré a tener en mis brazos al amor de mi vida, que seré infeliz hasta en la propia muerte y es allí cuando aquellos astros que iluminan nuestra vida se apagan, porque su única fuente de existencia era el amor.
Hay un planeta distinto a los demás, donde su fuente de existencia es la esperanza de que allí nos volveremos a ver, es en el que yo confío.
Hasta encontrarnos en Marte...