Valeria es una adolescente guatemalteca que está a punto de cumplir sus sweet 16. Desde afuera, su vida podría parecer envidiable: hija única, sin hermanos que la molesten, y con una familia que, según los demás, encaja en el molde de "perfecta". Sin embargo, la realidad es mucho más complicada.
Sus padres se separaron cuando tenía tan solo 2 años, y su relación con su papá es prácticamente inexistente. Apenas lo ve una vez al año, si tiene suerte, durante su cumpleaños o cuando hay trámites legales que realizar. Esta desconexión con su padre no le afecta tanto como podría pensarse; Valeria ha aprendido a aceptar las circunstancias y a encontrar su propia estabilidad emocional sin él.
A lo largo de la historia, Valeria reflexiona sobre lo que significa ser hija única y sobre las ventajas y desventajas de su situación. Mientras muchas personas asumen que su vida está llena de privilegios, ella enfrenta momentos de soledad y una desconexión familiar que pocos imaginan.
Con su madre como principal apoyo, Valeria navega entre las presiones sociales y sus propios deseos, cuestionándose si algún día las cosas podrían ser diferentes. Ahora, con su sweet 16 a la vuelta de la esquina, empieza a darse cuenta de que, aunque su vida no es perfecta, está lista para tomar las riendas de su propia historia.
Es una narración de autodescubrimiento y aceptación, que explora las complejidades de las relaciones familiares y lo que significa crecer en un mundo que constantemente exige encajar en un molde ideal.