Taesan, un joven que vive en un tranquilo pueblo costero, está atrapado en el dolor de la pérdida de su exnovio, Leehan, quien falleció en un trágico accidente poco después de su ruptura. A pesar del paso del tiempo, Taesan no puede superar la ausencia de Leehan, ni el sentimiento de que algo quedó sin resolver entre ellos.
Un día, decide regresar a la casa en la que vivieron juntos, buscando una manera de cerrar ese capítulo de su vida. Sin embargo, al entrar en la habitación de Leehan, comienza a escuchar extraños susurros que lo llaman por su nombre. En ese momento, Taesan descubre que el espíritu de Leehan no ha encontrado la paz y lo necesita para finalmente liberarse. A través de una carta escrita por Leehan antes de su muerte, Taesan se entera de que solo podrá perdonarlo y liberarlo de su sufrimiento si lo hace desde lo más profundo de su corazón.
A medida que la figura fantasmal de Leehan se materializa frente a él, Taesan se ve obligado a enfrentarse a su dolor y a la culpa que ha arrastrado durante tanto tiempo. En un último acto de compasión, Taesan le ofrece el perdón que Leehan busca, ayudándolo a encontrar la paz y liberarlo del tormento que lo ha mantenido atrapado en el limbo.
Fueron escasas las oportunidades en que JinYoung tuvo para apreciar a Im Jaebum descansar, y de esas veces sus manos se movían por sí mismas y se deleitaban con la aterciopelada piel, una sonrisa hacía presencia y su corazón se sacudía para esparcir amor por todo el lugar.