La tragedia de aquella noche marcó el fin del mundo unido. Los humanos, temerosos de los poderes de los mutantes, comenzaron a perseguirlos y expulsarlos de sus tierras. Los mutantes, debilitados y desorganizados tras la muerte del rey Drakov, huyeron a los rincones más lejanos del continente, donde formaron su propio territorio. Así nació la división: un continente para los humanos y otro para los mutantes. Entre ambos, una frontera invisible hecha de odio y resentimiento. Kevin, sin saberlo, se convirtió en el último vínculo entre ambos mundos. En el orfanato, crecería sin conocer su verdadera naturaleza, pero el destino ya había marcado su camino. El dragón de fuego estaba destinado a regresar.
12 parts