Toda la vida había soñado con intentar ser suficiente, para una familia que estaba acostumbrada a la disfuncionalidad, y un poco abusiva psicológicamente.
Crecí en un hogar disfuncional, no era de clase alta, pero tampoco era de clase baja. Me mantenía en el medio de ambas. Una familia latinoamericana común.
No crecí con una madre y mucho menos con un padre, viví al cargo de mi abuela y su esposo mucho tiempo, puesto que la vida se encargo de arrebatarme lo que se llama el amor parental de mis padres, mi madre murió cuando yo apenas era una bebé, puesto que solo estuvo en el lugar y la hora equivocada, en el dia equivocado.
De mi padre no hay mucho que decir... Era joven, y un poco alejado de asumir responsabilidades, por lo que luego de tres años el tribunal le asignó una colocación familiar a mis abuelos sobre mi.
A mis abuelos no les agradaba mucho la idea de que mi padre fuese mi padre, por lo que se encargaron de hablar muchísimas cosas frente a mí no tan buenas sobre el, y bueno ya saben, los niños creen todo lo que les dice. Un día mi padre dejo de insistir y perdimos totalmente la poca comunicación que teníamos, está claro que amaba a mi padre, pero pensé que si no estaba allí era porque el no sentia lo mismo hacia mi.
Una infancia dura, con mucha carencia de afecto, que intentaba ser comoensada por lo material.
Yo solo quería ser una niña como cualquier otra, con sus padres... Cabe destacar que no tengo hermanos, por lo menos no por parte de mi mamá, Pero por mi padre, somos cuatro... Yo soy una de las del medio.
Aunque esto es solo una pequeña parte de lo que les voy a contar, sería bueno que preparen sus pañuelos, pues así como hay muchos momentos de risa y alegría, también los hay de llanto y lastima, y esos son los momentos que más recuerdo.
Tal vez lo merecía y huí con la intención de tener una vida lejos de todos esos monstruos que me atormentan, pero es cierto eso de que tengo un corazón y los secretos,
Ulises Webster debía haber muerto esa noche. En cambio, ese accidente automovilístico sí que le había dejado heridas, y no sólo físicas.
Su vida anteriormente estaba llena de fiestas, arrogancia, hipocresía, vida social, sin embargo, todo había llegado a su fin. Ulises aún tenía la oportunidad de despertar, aunque siempre anhelaba que la muerte le llegará, después de todo, estaba solo.
Muchas preguntas lo dejaban con insomnio en las frías noches, pero principalmente una.
¿Quién querría estar con una persona ciega?